martes, 10 de enero de 2012

Guarrear las fuentes ya no cuesta 600 maravedís





























50. LAS FUENTES DE LOS TERMINOS ESTEN LIMPIAS Y SE GUARDEN DOS BARAS ALREDEDOR
Item ordenamos y mandamos que porque las fuentes estén limpias y sus nacimientos para el beber de las gentes y su servicio y aprovechamiento que ninguna persona abreve puercos ni laben en ellas otras suciedades, sopena de 600 mrs aplicados por tercias partes juez denunciador y concejo que todas dichas fuentes y nacimientos fuera de los pueblos que son conocidos resten limpias para el dicho servicio de los hombres dos baras de medir alrededor dellas so la dicha pena porque ansí conbiene al bien público. 

(Ordenanzas del Común de la Villa de Segura y su Tierra, promulgadas en Orcera en 1580)

Así que 600 maravedís era la receta que prescribían las legendarias Ordenanzas del Común de la Villa de Segura, a finales del siglo XVI, para los que los que guarreasen las fuentes de la Sierra de Segura. La multa no debía ser ninguna tontería teniendo en cuenta que por aquel entonces una docena de huevos en Castilla la Nueva costaba 63 maravedís, y que en aquella época, tan lejana aún de la ganadería industrial, comprar huevos con dinero era un lujo.

Hoy, sin embargo, por unos eurillos de nada compramos coca-colas, latas de atún, botes de cerveza y cartuchos con plomo. Incluso en medio de la crisis más temible, en conjunto somos una sociedad de una riqueza que en el siglo XVI era inimaginable. Y entre que estamos forrados y que no necesitamos las fuentes para nada, nos permitimos mancillar lo que debería ser un bien cultural público respetado con auténtica veneración. Y además sin temor a que te pillen y tengas que pagar un pastón, como ocurría en 1580. En algunos asuntos no hemos progresado demasiado.

La foto está hecha en un abrevadero en el monte de Peñalta (Orcera), no lejos de donde hoy está la plaza de toros de Orcera y antaño estuvo el Monasterio franciscano de Santa María de la Peña, que es el lugar en el que las Ordenanzas fueron firmadas con solemnidad por los procuradores de las villas y lugares que entonces formaban parte el Común. Más cerca aún, en la mismísima fuente que hay en ese lugar, aún llamada Fuente del Convento, se lavan coches con total tranquilidad.

A mí lo que más pena me da no es ya la total falta de sensibilidad de los contaminadores, sino que su conducta no es más que una de tantas consecuencias de esa falta de aprecio y de respeto por lo público -por todo lo público- que sigue aún tan arraigada.

Hoy en día estas cosas no se arreglan a base de maravedís, pero hace falta mucha educación ambiental, incluso mucha educación a secas. Seguro que lo conseguimos. Otros lo han hecho.

Foto: Javier Broncano

5 comentarios:

  1. Que tristeza se siente! al ver estas bochornosas imágenes en fotografías y en directo cuando vas por el filito de las carreteras o carriles caminando.

    Es increible encontrate hasta cajas impecables donde en su interior hubo un móvil, cajas donde en su interior hubo unas zapatillas y a los pocos metros te encuentras las zapatilas usadas desechadas, un bote de espuma para el pelo...nos vamos preparando en el coche y lo que nos sobra lo echamos por la ventanilla, sin más?.

    Importantísima la educación. Si al terminar de comer nos levantamos y dejamos en la mesa el plato para que otra persona lo recoja, pues ni te imaginas donde nos dejamos lo que nos estorba o sobra en el campo.

    En todo caso, me encanta que sigas denunciando estas conductas y vayamos tomando nota de cómo mejorar la educación en general y la ambiental en particular.

    Un abrazo

    Mamen

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  2. Gracias, Mamen,
    con el tiempo pienso que los cambios de actitudes son lentos, pero no me cabe duda de que son posibles si todo el mundo colabora: las familias, los medios, el sistema educativo, los responsables de Medio Ambiente, las asociaciones, etc. Es curiosa la mentalidad tan extendida de tener la casa super limpia pero luego no sentirse molesto por ver escombros, basurillas y demás, no ya en el monte, sino en las afueras de los pueblos y junto a las propias casas.

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  3. DESGRACIADAMENTE ESTAMOS A "AÑOS LUZ" DE ADQUIRIR UNA CULTURA ECOLÓGICA, SI BIEN, HEMOS AVANZADO-QUE DUDA CABE- PERO ES TAN INSIGNIFICANTE. ¡QUÉ PAIS DE BURROS! Y MIRA QUE ME DUELE DECIRLO,PERO ES ASÍ......

    ANDRÉS

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  4. Yo solo pido que cuando alguien vea algo así: recógelo, aunque sea una lata, que también nos es más cómodo pasar de largo y lamentarse que agacharse y guardar una lata en el coche hasta llegar a un punto de recogida. No cuesta ni un segundo.

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    1. De acuerdo contigo, aunque... a veces uno se cansa de llenar la mochila con la basura ajena!

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